lunes, 3 de agosto de 2009

Recetas

El trastorno había dejado perplejos a todos los médicos, era tal su complejidad que ni siquiera tuvieron tiempo para ponerle un nombre. En simples palabras se podía definir como una anomalía por la cual los ojos del paciente podían saborear las películas al igual que un plato de comida. Luego de rigurosos estudios psiquiátricos, psicológicos y físicos, se filtraron en el medio algunos datos inconexos que comprobaron que “El ciudadano Kane” produce el mismo efecto que comer un pollo al horno con batatas, las películas de Hitchcock tienen un condimento extrapicante imposible de reconocer y un sabor a cerdo agridulce acompaña las películas de Chaplin. Durante dos largos años el grupo de investigaciones recaudo datos de más de 6000 películas, colores, matices y gustos de los más diversos films, generando un libro con datos certeros para realizar un éxito de taquilla sin precedentes. Sin embargo debido a la compleja estructura que hay detrás de la industria cinematográfica, tuvieron que disfrazar el proyecto como un encriptado libro de cocina, cuyo nombre no será revelado aquí, obligando a cineastas, productores y actores, entre otros a crear una serie de mitos que llevaron a copiar recetas sin éxito, pero donde cada tanto aparece alguien con ideas propias para brindar una nueva receta original al catalogo.

No hay comentarios: