lunes, 11 de febrero de 2008

Ofuscado

Andaba ofuscado amasando dificultosamente la oscura sensación de aguantarse el hambre, mientras desde el mostrador flotaba el aroma insolente de una milanesa que todavía sus bolsillos no llegaban a pagar.

2 comentarios:

un viejo tanguero dijo...

Por desgracia, todavía hay mucha gente con ese tipo de ofuscación.

Maria Coca dijo...

Ofuscado e impotente. Un pobre hombre, en definitiva.

Besos.