miércoles, 12 de septiembre de 2007

Plantas

Callada y serena pasaba por la vida con una tranquilidad poco acostumbrada observandolo todo, nutriéndose y brindándose al mundo con su belleza, sin pedir mucho a cambio, y no digan nada, que esto quede entre nosotros, pero por las noches soñaba secretamente en convertirse en una hermosa planta de flores rojas igual a la que tenía en el patio. Lo que no sabía era que su planta, imponente y apasionada, segura y firme, arrolladora y altanera ya estaba lista para dar el siguiente paso y convertirse en mujer, robarle su casa, sus cosas y regarla todas las mañanas que pudiera recordarlo o cuanto haya un poquito de tiempo libre entre tantas cosas que pensaba hacer de su vida.
pd: El cambio estaba en marcha.

2 comentarios:

Catnip dijo...

Y madie se conforma con lo que le tocó, pero unos pocos se deciden a cambiarlo...

Anónimo dijo...

aaaaaaaaaaaaaaaah que interesante!!!!. queeeeeeeeee cosas de la vida.

Vine a agradecer tu visita por mi patio, perdon por mi blog. te dejo un abrazote y sigo leyendo.