lunes, 10 de septiembre de 2007

Puñalada

Un ser inerte e inocente yace sobre la mesa hasta que un arma letal se acerca a él, lo toma y atraviesa el abdomen inocente de una mujer recostada en un sillón. Al ver la sangre correr el cuchillo salta por la ventana dejando el arma recostada junto al cadáver de la mujer, la policía la recogió al otro día. Según el noticiero se trataba de un arma de 32 años, morocho y bastante gordito. Del puñal nadie sabe nada todavia y se sigue intensamente investigando para dar con su paradero, con algunos leves incicios de que tal vez se encuentre escondido en el barrio de Flores.